viernes, 12 de diciembre de 2008

"Héroes"

“A lo largo de la historia, no se podría hablar de ninguna cultura o civilización sin tomar en cuenta su alimento primogenio: los héroes. Por algún secreto motivo, el hombre sólo puede concebirse a sí mismo a través de la proyección de una figura mítica que lo redima de sus miserias. Claro que hay tantos tipos de héroes como de hombres, e incluso muchos de ello demostraron ser más humanos –por vulnerables, por falibles- que aquellos quienes los presuponen impermeables a cualquier debilidad.”[1]

A través del tiempo se podría hacer una lista innumerable de nombres propios calificados como héroes, con sus leyendas que con el tiempo se van agrandando y se recuerdan generación tras generación, agigantándose así su figura. En cambio otros decrecen popularmente, se esfuman, evaporándose hasta pasar prácticamente al anonimato.

Existen hombres y mujeres que han dedicado sus vidas personales a representar un símbolo de esperanza para aquellos cuya vida parece desesperada. Por lo tanto podemos afirmar que nuestros héroes pueden venir de muchos sitios.

Los héroes no son todos iguales, pueden ser justicieros y pacíficos, honorables y villanos, y no necesariamente son valientes.

Pero independientemente de la heroicidad mostrada o del resultado de ésta, la memoria de la humanidad es frágil, desleal, egoísta, olvidadiza, quizás porque nuestra historia está repleta de personas desinteresadas, en unos casos, y responsables en otros, que son capaces de exponer sus vidas por salvar las de otros sin importarles el precio y mucho menos el reconocimiento.

Nuestra intención no es la de hacer de este conjunto de miradas un drama bélico, de guerras y revoluciones, pero son en estos campos donde suceden, o surgen, acontecimientos, o personas, que terminan por ser reconocidas como héroes, eso sí, más obligados por las circunstancias que les rodean que por propio convencimiento. Nadie es un héroe hasta que el destino caprichoso lo nombra como tal a los ojos de la historia.

Bertolt Brecht dijo:

“Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles.”

Estos hombres luchan durante toda su vida para no quedar en un triste recuerdo.

Son imprescindibles, irremplazables aquellas personas que hoy denominamos: HÉROES.

Los héroes son aquellas personas admiradas por sus hazañas y virtudes, quienes han estado en miles de textos literarios o unas tramas cinematográficas...


[1] Revista Quid, nº17, año 3, Buenos Aires, p. 8

1 comentario:

Alejandra Finocchi dijo...

Gracias por la foto!!!!!!! Sos un ángel, ¿sabés? ¿¿¿Marcela tiene la dirección?? Mandásela! Excelente esa monografía...
Tu profe